Cuando un árbol sufre un corte, las resinas oxidan al contacto con el aire y se forma un "apósito" protector.
Así actúan los aceites y lasuras LIVOS: penetran en la madera, aglutinan sus fibras, las refuerzan y protegen del agua.
La resina natural añade resistencia y durabilidad
Las lasuras LIVOS mantienen de forma duradera la belleza de la madera y garantizan la protección a la intemperie y a los rayos UVA. Todo ello, en una gama de bellos colores naturales.
Son de poro abierto, hidrófugas pero permeables al vapor. No se agrietan ni cuartean. Se distinguen por su elasticidad duradera: se adaptan a los movimientos de la madera y los cambios climáticos, incluso en climas adversos. Tanto su aplicación como su renovación es fácil. La protección contra la fotodegradación se consigue mediante pigmentos minerales que actúan como filtros de la luz solar, al tiempo que decoran la madera.